Plebiscito Constitucional 2020. |
El 15 de noviembre del 2019 se anunció entre bombos y platillos lo que en su momento se llamó el "Acuerdo por la Paz". Este pacto tomado entre casi todos los partidos políticos de Chile incluía un Plebiscito Constitucional, el cual sería el mecanismo que se usaría como supuesta solución para frenar la violencia brutal de la Revolución Terrorista que por esos días azotaba sin compasión a nuestro país.
Sin embargo -y como era de esperarse- la acción de convocar a ese Plebiscito Constitucional no sirvió para nada. La violencia de los orcos y trogloditas siguió en aumento por durante los cuatro meses siguientes, y solamente vino a amainar a mediados de marzo conforme avanzaba una nueva amenaza para el país: la pandemia de coronavirus. Es decir, en la práctica este Plebiscito resultó ser inútil, pues no sirvió para lo que fue concertado.
Después del primer cambio la fecha de realización del Plebiscito Constitucional, debido a que la pandemia seguía incrementando en su gravedad, se le fijó para el domingo 25 de octubre del 2020. Es decir, ilusamente creyeron que el desastre que ha sido la crisis por el covid-19 iba a frenar de un día para otro con tal de permitir que se pudiese realizar el famoso e inútil Plebiscito.
A estas alturas, en verdad me parece insólito que se siga insistiendo en hacer un Plebiscito que ya se demostró que no sirvió para lo que fue creado. Y con mayor razón resulta increíble que con esta pandemia que estamos sufriendo todavía no se le haya suspendido definitivamente. Lo que se debería de hacer es dejar el debate constitucional como tema de discusión para las elecciones presidenciales del 2021, y chao con este Plebiscito inservible.
Tratar de insistir en ejecutar el Plebiscito sólo tiene la finalidad de gastar más fondos públicos y dividir aún más a la población, pues para frenar la rudeza del terrorismo incendiario de ultraizquierda ya definitivamente no sirvió.
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