Antes que todo, quiero comenzar estas palabras admitiendo mi profundo respeto y aprecio hacia Perú y Bolivia, a quienes considero como países hermanos para nuestro querido Chile, pero que lamentablemente por motivos de la vida junto con diversos acontecimientos políticos e históricos, hemos terminado en conflictos belícos ya en dos oportunidades (Guerra del Pacífico y Guerra contra la Confederación). La Historia es para recordarla, pero también para aprender de ella y de sus errores. Ojalá nunca más tengamos que vernos enfrentados entre pueblos que compartimos una raíz cultural común a todos nosotros. Dios quiera que así sea.
Arturo Prat Chacón. |
Una vez dicho esto, recalco la gallardía y valentía de Don Arturo Prat Chacón, quien un 21 de mayo de 1879 perdió su vida en combate, durante el hecho bélico que marcó a fuego lo que fue la Guerra del Pacífico... "¡Muchachos: la contienda es desigual, pero ánimo y valor. y espero que no sea ésta la ocasión de hacerlo!" fue la corta pero contundente arenga del capitán Prat antes de brincar desde La Esmeralda a la la superficie lustrosa del Huáscar, en un salto valeroso que lo llevó no sólo a la muerte sino que también a la eternidad.
Resulta curioso que en Chile se conmemore una derrota como fecha de las Glorias Navales, pues el Combate Naval de Iquique se perdió. Pero fue una derrota anímicamente tan significativa que pavimentó el camino para victorias futuras. Sin embargo, no todo fueron caídas estrepitosas para Chile durante esa jornada, ya que ese mismo día en el Combate Naval de Punta Gruesa, la modesta corveta Covadonga hundió a la fragata blindada Independencia. El inesperado desenlace del Combate de Punta Gruesa junto al empellón de haber perdido a La Esmeralda en crudo enfrentamiento fue un potente aliciente para la Armada Chilena. El 21 de mayo de 1879 fue la piedra angular de las próximas Glorias Navales chilenas durante la Guerra del Pacífico.
Sin embargo -y vale la pena recalcarlo- esta guerra no sólo significó sufrimientos para Chile, Perú y Bolivia. También hubo verdaderos héroes, y por ambos bandos: el sacrificio mártir de Arturo Prat, la impresionante destreza de Carlos Condell, la caballerosidad y rectitud del almirante Miguel Grau, el temple y valentía del coronel Francisco Bolognesi, o la visión de estratega que tuvo el general Manuel Baquedano. Todos, grandes héroes. Todos, grandes patriotas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario