Para nadie es un misterio que el Chile de hoy no es el mismo hace veinte años atrás, y ni siquiera es el mismo de hace una década atrás. Lamentablemente, durante el último tiempo, nuestro país ha cambiado, y lo ha hecho para peor.
Chile lo pasa mal. |
1) El fin del sistema binominal: El sistema binominal permitía que la política en Chile girara en torno a los grandes acuerdos, forzando a los partidos a alinearse a uno de los dos principales bloques políticos, lo cual traía como consecuencia una competencia centrípeta por el poder. A partir del año 2013, los políticos de RN (Renovación Nacional) negociaron con la izquierda para terminar con el sistema binominal, lo cual en la práctica se tradujo en la llegada masiva de comunistas y neomarxistas extremos al Congreso chileno, empeorando a la clase política aún más de lo que ya estaba.
2) La Reforma Tributaria de Bachelet: El gran carretón de escombros que día a día va frenando la Economía es la actual Reforma Tributaria, que en su momento fue aplicada por Alberto Arenas, ministro de Hacienda del segundo gobierno de Michelle Bachelet. Aunque parezca insólito, este brutal impuestazo sigue plenamente vigente en Chile, y podría seguir empeorando si es que ahora se logra aprobar la nueva Reforma Tributaria que propone el gobierno de Gabriel Boric. Ese sería otro frenazo más para la Macroeconomía nacional.
3) El Estallido Terrorista del 2019: Si hay una fecha que literalmente marcó a fuego a nuestro país fue el nefasto Estallido Terrorista del 2019 y 2020, que se inició durante el ya fatídico 18 de octubre del 2019. Desde ese día hasta ahora, todo lo que ha sucedido en Chile ha sido una cascada interminable de errores, crisis y calamidades.
4) Terrorismo en La Araucanía: El terrorismo incendiario de ultraizquierda es una verdadera desgracia, y no sólo lo es para los campesinos de La Araucanía, sino que es una preocupación y un drama permanente para casi todos los agricultores de la macrozona sur de nuestro país. Los daños causados por el terrorismo en Chile son incalculables, tanto por las muertes de personas inocentes como por las cuantiosas pérdidas materiales que ello conlleva.
5) El proceso constituyente: El gran error del expresidente Sebastián Piñera fue acceder a cambiar la Constitución de Chile como medida desesperada para terminar con el Estallido Terrorista. De partida, ese acuerdo no trajo la paz al país, sino que lo único que ha traído es incertidumbre, desorden y caos, estancamiento económico, y una vorágine de discusiones que alejan cada día más a la casta política de los problemas realmente importantes que afectan a nuestra sociedad, como lo son la delincuencia, el terrorismo, la cesantía, la inflación y la crisis macroeconómica generalizada.
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