sábado, 19 de diciembre de 2020

"Sello Experto Constitucional": La estrategia que debe usar la derecha para la elección de constituyentes

 Se acerca a pasos agigantados el domingo 11 de abril, día en que será la elección más importante de la Historia de Chile durante el siglo XXI.

Las cosas hay que decirlas por su nombre: Los líderes de Chile Vamos y del Partido Republicano parecen no estar conscientes de lo que nos estamos jugando. El domingo 11 de abril será la elección más importante que se haya realizado en Chile en todo lo que va del siglo XXI, y hasta ahora casi todos los candidatos que suenan como posibles constituyentes son de izquierda o de ultraizquierda... ¿Qué pasa que nadie o casi nadie sabe de los candidatos de derecha y de centroderecha? Al parecer, en nuestro sector político ya están dando por perdida la verdadera "madre de todas las batallas", con lo cual le regalarán en bandeja el país a los mismos personajes que quieren someternos a una Constitución de carácter neomarxista y chavista. Mal, todo mal.

Y la situación se torna aún más crítica al analizar la nefasta estrategia que ha tomado la izquierda: al contar ellos con un apoyo masivo dentro de la farándula y de los sectores "artísticos", la gran mayoría de sus candidatos son gente que no tiene la menor idea de cómo redactar una Constitución, pero que cuentan con el plus de ser conocidos y famosos. Es así como en el desfile de aspirantes a constituyentes de la izquierda podemos contar por decenas a actores, cantantes, animadores televisivos y humoristas... pero los abogados constitucionalistas brillan por su ausencia, siendo acá el caso de Fernando Atria una golondrina que no hace primavera, ni mucho menos (porque de partida, Atria más parece ser una barracuda que una golondrina). 

¿Qué puede hacer la derecha ante esta feroz arremetida de candidatos de izquierda que son legos en materia constitucional, pero son que famosos y sus postulaciones parecen estar diseñadas más para ganar elecciones que para redactar una Constitución? ¿Acaso finalmente tendremos una Nueva Constitución redactada por ignorantes, y para peor aún, por ignorantes de ultraizquierda? Las predicciones pueden parecer aterradoras, y ante esto, la derecha tiene sólo dos opciones posibles: la primera es buscar también candidatos dentro de la farándula, y la segunda es ridiculizar a los postulantes faranduleros de la izquierda. Yo creo que es más cuerda y creíble la primera opción, pero hay que definirse al respecto lo antes posible. 

¿Y cómo se puede llevar a cabo una estrategia a gran escala que permita aminorar el daño electoral que podría provocar una horda de candidatos izquierdistas salidos del mundo de la farándula y las teleseries? Lo primero es tratar de diversificar el prototipo de los postulantes. Buscar candidatos que sean indígenas, candidatos que sean inmigrantes ya legalizados en nuestro país, y también candidatos que pertenezcan a las minorías sexuales. Hay que quitarle esas tres banderas de lucha a la izquierda, pero hacerlo de una vez y en forma inteligente. A la izquierda hay que enfrentarla de igual a igual en la batalla cultural, y para hacerlo, hay que quitarle todas esas banderas que no son de izquierda pero que ellos pretenden hacernos creer que sí lo son.

Pero lo más importante es llevar candidatos que sean capacitados, y ridiculizar a los candidatos de ultraizquierda salidos de farándula. Lo que podría hacerse es algo como un "Sello Experto Constitucional", el cual sea un distintivo que acredite en la gráfica (impresa y audiovisual) de todos los candidatos de derecha que tengan expertise comprobable en temáticas constitucionales, es decir que sean abogados especialistas en la materia. Y esto debe ser algo concreto y palpable, que el electorado pueda fácilmente distinguir a estos candidatos, y diferenciarlos de la basura farandulesca que pretende vendernos la izquierda, con su horda de animadores mediáticos, humoristas, cantantes y actores. La campaña comunicacional de la derecha debe ser radical y algo nunca antes visto en Chile, que todos puedan identificar a los postulantes con el "Sello Experto Constitucional", y que esto aparezca como un plus a la hora de votar por ellos. 

La cosa es simple: Si la derecha y centroderecha buscan candidatos entre los actores, cantantes y humoristas, inevitablemente vamos a perder por paliza contra la izquierda, porque en ese sector la izquierda tiene muchísima más llegada que la derecha. Lo que hay que hacer es aprovecharse del descontento que hay contra la clase política, y presentar una batería de aspirantes que vengan de afuera del mundo de la política tradicional, pero que a diferencia de los candidatos de izquierda sean gente que sí sabe sobre cómo redactar una Constitución. Y para lograr esto, tiene que hacerse acompañado de una campaña comunicacional impresionante, para lograr que esos rostros de esos expertos constitucionales se hagan tan conocidos como los actores y humoristas que llevarán la Nueva Mayoría y el Frente Amplio. Hacer algo así en cuatro meses parece ser una tarea titánica -y claro que lo es- pero o nos ponemos en campaña ahora mismo, o le regalamos en bandeja a la izquierda la que será la elección más importante que tendrá Chile en todo el siglo XXI. La pelota está lanzada, sólo depende de los líderes de Chile Vamos y del Partido Republicano si la recogen e inician el contragolpe, o si prefieren seguir mirando al techo a ver si sucede lo imposible sin ni siquiera moverse del escritorio.

El "Sello Experto Constitucional" no sólo es una propuesta que yo hago: a esta altura de la carrera electoral ya debería ser una obligación y estar en plena marcha...

No hay comentarios: