Sorpresivo para algunos, pero para muchos esperado. Este sábado 13 de junio se anunció el cambio de gabinete en el Ministerio de Salud, debido al complejo manejo de la pandemia por coronavirus en nuestro país. Sale Jaime Mañalich y entra Enrique Paris, ambos médicos de una vasta y dilatada trayectoria, ambos grandes profesionales del área de la Salud.
Dr. Jaime Mañalich |
Finalmente la presión de los medios de prensa y las críticas despiadadas de la ultraizquierda cavernaria dieron frutos. Una vez más el presidente Sebastián Piñera cayó de rodillas ante los ladridos furibundos de la barra brava de la oposición, y accedió a hacer un cambio de timón cuando los más lo odian son quienes se lo exigen. Mal, muy mal.
Ser ministro de Salud de por sí es difícil, y sobre todo cuando nos enfrentamos a una pandemia terrible, pues estamos frente a una catástrofe tan grave que incluso tiene en vilo a las principales potencias del mundo. Hay que decirlo: ser ministro de Salud en plena pandemia es tan complicado como ser ministro de Defensa en medio de una guerra. Y bajo esa lógica, Jaime Mañalich respondió, porque si la tasa de mortalidad por coronavirus en Chile es más baja que en muchos países, es justamente por la impecable gestión del ex ministro Mañalich y por el buen trabajo de los profesionales médicos y paramédicos del país. Si la tasa de contagios es alta, la culpa no es de Mañalich ni del gobierno, sino que de la gente porfiada que no hace caso y sigue saliendo pese a todas las indicaciones sanitarias que se han entregado.
Muchas gracias por todo doctor Mañalich. Gracias por dejarlo todo en la cancha. Usted es un médico noble, y que dio lo mejor de sí. Estamos hablando de un hombre que posee una patología de base porque no tiene un riñón, un hombre que por motivos de salud no puede ver a su esposa hace ya cuatro meses, un hombre que tenía que dormir cuatro horas diarias para poder estar en todos los frentes. Estoy seguro que la ultraizquierda cavernaria jamás va a reconocer esto, y por eso mismo también le doy las gracias doctor Mañalich: por ponerle el pecho a las balas pese a estar frente a la pandemia más brutal de los últimos cien años, y pese a tener que soportar a diario los cruentos ataques de la peor oposición de la Historia de Chile. Por todo esto y mucho más, gracias doctor Mañalich.
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