Ganar el Superclásico siempre será una obligación, y más aún en la situación actual en que marcha la "U", ya que está en puestos de descenso directo. Por eso mismo que la derrota sufrida esta tarde por Universidad de Chile ante Colo Colo es particularmente lamentable y dolorosa.
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| Nicolás Oroz acelera con la pelota. |
El partido de hoy fue raro. La "U" tuvo un primer tiempo intenso y a buen ritmo, donde empezó ganando y sorprendiendo a los albos en el propio Estadio Monumental. Fue Universidad de Chile quien golpeó primero en el reducto de Pedrero, empezando en ventaja tras un certero penal de Gonzalo Espinoza (12´).
Sin embargo, luego de una buena primera fracción, vino un segundo tiempo de espanto para Universidad de Chile, donde los azules volvieron a repetir los mismos ripios de toda la temporada: una defensa descoordinada, una delantera sin pólvora, y un mediocampo errático e incapaz de generar ocasiones de peligro. Así fue como llegaron las dianas de Gabriel Suazo y Esteban Paredes para el local (50´y 65´). Más tarde vendría el golazo de Ángelo Henríquez (76´) para poner la incertidumbre, pero en el último minuto fue el defensa Julio Barroso (94´) quien pondría el balde de agua fría con el tanto del 3-2 definitivo para los albos.
Ahora sólo queda cruzar los dedos y esperar que la "U" pueda enmendar el rumbo perdido, y evitar un descenso que sería realmente lamentable. Esta nueva derrota en casa del archirrival caló hondo, y ojalá que el equipo pueda recuperar la confianza en la recta final del campeonato. Ser hincha de la "U" nunca fue fácil, pero en momentos como éste es cuando hay que tener no sólo aguante sino que también cuero de chancho... ¡en las buenas y en las malas!
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