Para nadie es un misterio: la actual Reforma Tritutaria de Michelle Bachelet ha sido un completo desastre. La economía está totalmente estancada, al igual que el crecimiento económico y la generación de empleo. Chile necesita con urgencia una nueva reforma tributaria, aunque a los más fanáticos de izquierda les duela admitirlo.
Piñera, mi candidato a La Moneda. |
Si de mí dependiera, partiría por algo básico: terminar con cuatro clases de impuestos que por uno u otro motivo ni siquiera deberían existir. Me refiero básicamente a las contribuciones, al impuesto a la herencia, al impuesto al libro, y al IVA a los medicamentos en caso de enfermedades crónicas. Además le haría una profunda modificación al destino de lo recaudado en los llamados "impuestos verdes". A continuación explicaré en forma muy breve cada uno de estos puntos.
1) Contribuciones: De todos los impuestos existentes, creo que ninguno es más injusto que el pago de contribuciones por un bien inmueble que ya es de uno, y que hay que seguir pagándolo de por vida... aunque el afectado sea un adulto mayor que hace años que tiene que vivir solamente de una pensión. Es de vital importancia que el próximo gobierno termine de una vez por todas por un impuesto que es ilógico que exista.
2) Impuesto a la herencia: Otro impuesto que es injusto y que no tendría que existir. Una persona se esfuerza toda la vida para darle un mejor pasar a sus hijos, y en lo posible dejarle algo como herencia tras su muerte. Cobrarle impuesto por esto es burlarse del esfuerzo de años de ese padre de familia.
3) Impuesto al libro: Este impuesto es un atentado contra la difusión de la cultura en Chile. Abolirlo sería una de las primeras medidas que yo tomaría si formara parte de un gobierno.
4) IVA a los medicamentos en casos de enfermedades crónicas: Alguien que sufre de una patología crónica ya es un padecimiento lo suficientemente terrible como para además tener que comprar medicamentos cada vez más caros. Quitarle el IVA a los fármacos que consume esa persona ya podría ayudar en algo a aliviar su también alicaído bolsillo.
5) Impuestos verdes: Está bien que existan los impuestos verdes. Lo que está mal es que se utilicen para cualquier cosa menos para lo que fueron creados. En los países desarrollados, los impuestos verdes existen para que cuando una entidad o empresa produce cierto daño al Medioambiente pueda remediar en parte ese daño pagando una cantidad de dinero, el cual será usado en otros ítems como el cuidado de parques nacionales o la protección de la fauna nativa. Sin embargo, lamentablemente Chile es el único país del mundo en donde se cobran estos impuestos verdes pero esos fondos son utilizados en tópicos muy distintos a la protección de la Biósfera...
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