sábado, 4 de febrero de 2017

En política defiendo ideas, no personas...

Siempre lo he dicho y lo diré con orgullo: soy totalmente de derecha, y jamás intentaré camuflar mis pensamientos diciendo ser "de centroderecha" como lo hacen otros. Sin embargo, soy abierto de mente y jamás trataré de obligar a pensar a otros como yo, y si alguien cree que es mejor decir que es "de centroderecha" que se derecha a secas, es su parecer y no intentaré cambiarlo.
Siempre defenderé a mi país, con orgullo y amor

Si bien me defino como una persona dialogante y que trata de buscar los acuerdos y puntos comunes, de todas formas en política hay ideales que no transo y que siempre voy a defender: la libertad, el emprendimiento, el orden público, la dignidad para los más vulnerables, la lucha contra la pobreza, la inclusión, el cuidado del medioambiente, el patriotismo, la integración con otras razas y culturas, la globalización, la economía social de mercado, y también el antimarxismo (debido a que el marxismo es el padre de muchas de las calamidades que han azotado al mundo en los últimos cien años). Básicamente, todos esos puntos sintetizan lo que yo pienso en política.

Es así como en política mantengo firme mi postura y siempre me la voy a jugar por defender esas ideas. Sí, porque yo creo en la concepción de defender a ideas más que a personas, ya que defender a personajes políticos o históricos como si fueran semidioses hace que la política se transforme más en una religión que en un camino para buscar el Bien Común de la sociedad.

A pesar de todo esto, estoy plenamente consciente que si por defender esas ideas tengo que defender lo hecho por ciertos personajes históricos, lo haré sin problemas. Es así como creo que es incorrecto hablar de piñerismo, pinochetismo, bacheletismo, allendismo, laguismo, o cualquiera de esas pseudoideologías que en el fondo no son más que poner a cierto político arriba de un pedestal y defenderlo como si fuera un semidios. Yo creo en ideas -en las ideas de derecha- con las cuales comulgaré siempre, y si por defenderlas tengo que salir en defensa de ciertas obras hechas por líderes como el presidente Piñera o el general Pinochet, no dudaré en hacerlo. Pero antes que todo, reitero: defiendo a ideas y no a personas...

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