El cardenal de Jerusalén se ofrece como intercambio para rescatar a los niños rehenes de Hamás

Una actitud absolutamente valorable es la propuesta hecha esta jornada por el padre Pierbattista Pizzaballa, quien se ofreció a sí mismo como "moneda de cambio" para tratar de salvar la vida de algunas de las personas que se encuentran cautivas por el peligroso grupo terrorista palestino.

El cardenal de Jerusalén.

El Patriarca Católico Latino de Jerusalén, el cardenal Pierbattista Pizzaballa, ha ofrecido ser intercambiado por los niños actualmente se encuentran cautivos en manos de los terroristas de Hamás, en la Franja de Gaza. En una reciente videoconferencia con periodistas este 16 de octubre, el Cardenal expresó su disposición a cualquier medida que pueda asegurar la liberación de los rehenes y reunir a los niños con sus familias. 

La situación es crítica, y se ha agravado cada vez más tras el violento ataque de Hamás a Israel la semana pasada. De acuerdo a las Fuerzas de Defensa de Israel, se informa que al menos 199 rehenes israelíes, incluidos niños, están actualmente bajo custodia de los terroristas de Hamás. Ante esta preocupante circunstancia, el cardenal Pizzaballa destacó la necesidad imperiosa de encontrar una solución que asegure la liberación de los rehenes.

El Vaticano pide mediar un acuerdo de paz

El Vaticano también ha expresado su disposición a mediar en un acuerdo de paz. El secretario de Estado vaticano, el cardenal Pietro Parolin, subrayó en una entrevista la importancia de la liberación de los rehenes israelíes y la protección de las vidas inocentes en Gaza. La Santa Sede se ha mostrado dispuesta a ofrecer cualquier mediación necesaria para aliviar la tensión y promover la paz en una región azotada por la guerra.

Se convoca a una jornada de oración y ayuno 

Además, el cardenal Pizzaballa ha convocado una jornada de oración y ayuno por la paz y la reconciliación en Tierra Santa para este 17 de octubre, instando a los católicos a unirse en oración y a pedir la intervención divina en estos duros tiempos de angustia y conflicto.

"En este tiempo de dolor y consternación, no queremos permanecer impotentes. No podemos dejar que la muerte y su aguijón sean la única palabra que oigamos", enfatizó el cardenal Pizzaballa, resaltando la importancia de la solidaridad y la esperanza en medio de la crisis.