La edil de Providencia además realizó una fuerte crítica contra el otro precandidato de la UDI, Joaquín Lavín.
El constante zigzagueo político de Joaquín Lavín aburrió a buena parte de la UDI (Unión Demócrata Independiente). La gota que rebalsó el vaso fue cuando el precandidato presidencial de dicho partido se denominó este fin de semana como "socialdemócrata", lo cual espantó a un sinnúmero de personalidades vinculadas a la derecha tradicional.
Uno de los rostros más críticos contra el discurso del actual alcalde de Las Condes fue la también edil, Evelyn Matthei. En entrevista dada al diario La Segunda, Matthei no se guardó nada para referirse al oscilante discurso de Lavín: “Si quisiera votar por un candidato socialdemócrata, preferiría a Ricardo Lagos Weber por sobre Lavín, sencillamente, porque Lagos Weber siempre ha sido un socialdemócrata y, por lo tanto, es una persona creíble. Lo que me preocupa es el zigzagueo político. Tildarse uno mismo de socialdemócrata es decir soy PPD, porque hay tradiciones, nombres y conceptos que han sido propios la derecha o la izquierda. Y la socialdemocracia ha sido el concepto de la izquierda más moderna, de la izquierda del PPD; de Lagos Weber, Harboe… Lo que pasa es que uno no puede decir cualquier cosa con tal de ganar un par de puntos. Lavín en el fondo, trasunta que, con tal de ganar una nominación o una elección, está dispuesto a cualquier cosa. Incluso tildarse de socialdemócrata cuando, en realidad, nunca lo ha sido”.
A su vez, y respecto a la posibilidad de ser candidata al cargo más importante del país, Evelyn Matthei confirmó que está dispuesta para aceptar el desafío de una nueva postulación al sillón presidencial de La Moneda, la cual sería su segunda aventura de este tipo a lo largo de su ya extensa carrera política (el 2013 perdió contra Michelle Bachelet en segunda vuelta).
Al respecto, creo que esto tiene puntos buenos, pero también siembra un par de dudas. Mi principal interrogante es que Evelyn Matthei tiene aclarar por qué en el Plebiscito Constitucional está a favor del Apruebo y no del Rechazo, alternativa que apoya casi todo el electorado de la derecha tradicional. Y en caso de seguir estando a favor del Apruebo (la opción mayoritaria de la izquierda y centroizquierda), su argumentación debe ser lo suficientemente sólida como para convencer a un votante muy de derecha que no está dispuesto a moverse ni un centímetro de su postura.
Sin embargo, aparte de esta duda (que se la hacen muchos partidarios de la derecha chilena), creo que sería un lujo que Chile Vamos pudiese contar con Evelyn Matthei como candidata a primera vuelta, ya que ella tiene una serie de virtudes de las que Joaquín Lavín carece. Ir a primera vuelta con Matthei por un lado y José Antonio Kast por el otro (con el respaldo de su propio partido) sería poner toda la carne a la parrilla, en un desafío electoral que vislumbra con ser el más polarizado que ha tenido Chile desde los tiempos de la Guerra Fría. Si vamos a enfrentar a la izquierda (en las urnas) debemos hacerlo con todo, y llevar lo mejor de lo nuestro.
Respecto a la posibilidad de hacer una primaria entre Evelyn Matthei y José Antonio Kast, creo que no sería conveniente. Y esto por un motivo práctico: a primera vuelta tiene que ir un representante de Chile Vamos junto a Kast, para que ese día voten los electores de todas las derechas (centroderecha liberal y derecha conservadora), ya que también se hará ahí mismo la elección parlamentaria y se elegirá esa jornada al futuro Congreso. En cambio si sólo va un candidato (Kast o Matthei), habrá mucha gente cómoda que no irá a sufragar en primera vuelta, perdiéndose votos importantísimos para elegir a los futuros diputados y senadores que tendrá el país.
Lo que hay que hacer es que a primera vuelta vayan Evelyn Matthei y José Antonio Kast, cada uno mostrando el modelo de Chile que quiere para el futuro, pero evitando el fuego amigo. Es decir, sin encontronazos ni mordiscos entre ellos. Y después de eso, tenemos que unirnos todos y apoyar sin condiciones al que pase a la segunda vuelta, sea Kast o Matthei. El adversario es la izquierda, y el enemigo son orcos los que promueven el terrorismo y quieren ver al país en el piso, y ese es el norte que nunca tenemos que perder de vista.
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