El tuit de Vallejo. |
En medio del álgido debate que por estos días se da en la arena política nacional, este martes la diputada comunista Camila Vallejo se despachó una joyita de aquellas: confundió lo que es el impuesto que se le cobra a las empresas con el impuesto al patrimonio de sus propietarios. Un error insólito e imperdonable en alguien que se supone que está a cargo de hacer las leyes de nuestro país. Aunque en el fondo tampoco es algo muy inusual: pedirle a un comunista que entienda de Economía es como pedirle a una tortuga que entienda de Astrofísica o a un mono que hable en polaco.
Hace pocos días, el destacado economista Joseph Stiglitz (ganador del Premio Nobel en el año 2001) y su colega Thomas Piketty dijeron que se requería de una Reforma Fiscal Global para palear la crisis financiera del mundo entero, y que las grandes empresas deberían de pagar un 25% de impuestos. En Chile esto de por sí no es ninguna novedad, ya que las megacompañías tributan en un 27%, es decir incluso más que lo que proponen estas dos eminencias.
Sin embargo, ahí apareció la iluminada de Camila Vallejo diciendo que "los más ricos se escandalizan cuando les queremos cobrar un 2,5% y deberían pagar un 25%", confundiendo lo que se le quiere cobrar como impuesto al patrimonio con la tributación que pagan las empresas. Error garrafal.
De la señorita Camila Vallejo puede decirse mucho, ya que es una de las diputadas más tontas que hay en Chile. Sin embargo, no deja de llamar la atención la obsesión enfermiza de la ultraizquierda nacional por querer subir aún más los impuestos en período de crisis económica, lo cual a la larga traerá aún más problemas de cesantía. Los comunistas y sus aliados quieren reventar con impuestos patrimoniales a las personas que -directa o indirectamente- más empleos generan en nuestro país. De ser así, ¿acaso serían los comunistas y los tragamocos del Frente Amplio los que generarían esos puestos de trabajo que se perderían? No, pamplinas. Los comunachos nunca en su vida han generado un empleo: sólo deudas, conflicto y división, para eso sí que son expertos.
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