Si bien yo creo que en política es crucial mirar hacia el
futuro, también sería un error grosero dejar la memoria histórica del país exclusivamente en manos de la ultraizquierda, que es lo que muchos parlamentarios
buscan imponiéndonos la Ley Mordaza o “Ley
de incitación al Odio”, como ellos mismos la autodenominan.
¿Puede alguien incitarle al odio a una persona que ya está
llena de odio por dentro, como es el caso de esta gente? Creo que no. Es
incorrecto que quienes tenemos una postura histórica distinta a la de la
izquierda les incitemos al odio: son ellos mismos los que están llenos de odio
y venganza, y más que inventar una ley de censura les recomendaría visitar a un
psiquiatra…
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| Viva CHILE... |
Ya han pasado años y décadas desde los lamentables hechos en
Chile durante la Guerra Fría, donde hubo sufrimiento por parte de ambos
sectores ideológicos. La mejor forma de dar vuelta la página es con la
tolerancia y la empatía, tratando de mirar al que piensa distinto no como un
enemigo sino que simplemente como alguien que opina diferente. Lo ideal sería
hacer algo parecido a lo que alguna vez hizo Nelson Mandela con su Ley de
Amnistía, pero creo que eso tal vez sería pedirle demasiado a la izquierda
chilena.
Como nación no debemos caer en políticas dictatoriales tan
nefastas como lo sería una Ley Mordaza. Mejor demos la lucha en la cancha, defendiendo ahí nuestras ideas y
principios en vez de tratar de abortarlos mediante el uso de la prohibición, la
censura y la coerción. Ahora estamos en democracia, y por eso mismo es vital
que usemos las reglas de la democracia para regir nuestro diario vivir en un
país que alguna vez fue un país de hermanos, y que personalmente me gustaría
que volviera a serlo.
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