lunes, 2 de febrero de 2015

La sorprendente máquina que inspiró a la cinta “Código Enigma”

La aclamada película basa en el desarrollo del primer computador de la historia, el cual fue determinante durante el transcurso de la Segunda Guerra Mundial

Durante estos días previos a los Premios Oscar, una de las películas más reconocidas por la crítica, y que está nominada a ocho premios de la Academia, es “El Código Enigma”, cinta bélica que relata los difíciles días en que la Inglaterra de Winston Churchill hacía lo humanamente posible para aguantar los furbibundos embates de la Alemania Nazi, en plena Segunda Guerra Mundial.
La Máquina Enigma

Esta película se basa en hechos reales, pues abarca los pormenores tras la creación de la máquina Colossus, la cual puede ser considerada con toda justicia como “el primer computador de la historia”, y que tuvo una función rutilante en la misión de lograr descifrar el llamado “Código Enigma” alemán, el cual ordenaba toda la estrategia militar de los germanos junto a su flota de submarinos que a esas alturas del combate aparecía como indestructible.

La máquina enigma alemana era parecida a una máquina de escribir pero conformada por tres rotores de 26 contactos, lo que sumado a un sistema eléctrico muy avanzado para la época hacían que las posibilidades de encontrar el significado de cada letra era de una en varios billones de resultados posibles. Esto tenía desesperado a los espías ingleses, ya que la tarea titánica de obtener  la información estratégica de los nazis aparecía como algo francamente imposible.

Fue ahí cuando apareció la figura del genio matemático Alan Turing, quien logró crear un sistema conocido como “La Bomba”, el cual fue el primer instrumento que descifró las claves y contraseñas enviadas por Enigma. A partir de la máquina electromecánica de Turing, un grupo de destacados científicos pudo dar forma a Colossus, la cual según el propio Winston Churchill permitió acortar la guerra en por lo menos 18 meses.

Pese a la rutilante importancia que acá tuvo Alan Turing, quien hasta nuestros días aparece como uno de los padres del computador multipropósito, su exitosa faceta profesional contrasta con una trágica vida personal. En tiempos en que la homosexualidad era un tema tabú para la sociedad, el sufrió en carne propia del rechazo de sus pares, lo cual finalmente lo llevó al suicidio, siendo el final más lamentable que podía esperar el que hasta ahora es considerado uno de los mayores genios del siglo XX.

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