Reflexiones tras el homenaje a Pinochet

Este miércoles 10 de diciembre se cumplían ocho años desde el sensible fallecimiento del general libertador Augusto Pinochet. Al respecto, y pese a que se sabía que la oposición de los amargos de siempre será muy ácida, un grupo de diputados de la UDI (unión Demócrata Independiente) tuvieron la hombría de realizarle un minuto de silencio como homenaje en pleno Congreso. Obviamente el hecho generó polémica y declaraciones muy opuestas. A continuación enumero algunas reflexiones que hice al respecto:

Pinochet, un patriota

1)      Pinochet no se merece un homenaje… ¡se merece muchos homenajes!

2)      Digan lo que digan, Chile le debe mucho el general Pinochet, ya que él fue quien liberó a Chile en su momento más crudo y duro: la hecatombe generalizada durante el desgobierno de Salvador Allende.

3)      Si bien muchas veces he criticado a la UDI de ser muy timorata y temerosa a la hora de defender el legado del Gobierno Militar, en esta oportunidad debo sacarme el sombrero ante la valentía que presentaron algunos de sus parlamentarios.

4)      Así como alabo la actitud de esos políticos de la UDI que realizaron el minuto de silencio en honor a Pinochet, igualmente aborrezco a ese grupo de diputados UDI que abandonaron la sala. A ellos les digo COBARDES y TRAIDORES, con todas sus letras.

5)      Aunque a la izquierda le duela y le moleste, mientras Chile exista siempre habrá pinochetistas…

6)      Sin dudas que con la polémica por el homenaje a Pinochet, la más beneficiada de la jornada fue la presidenta Bachelet: por un día completo, su ineptitud e inoperancia no fueron los temas centras de la política chilena.

7)      Los chilenos tenemos todo el derecho a homenajear a quien queramos: no tenemos por qué darle en el gusto a la izquierda odiosa e intolerante.

8)      Han pasado 41 años desde el Pronunciamiento Militar de 1973, y la izquierda sigue vomitando odio.

9)      Mientras la izquierda no deje de vomitar odio, Chile nunca más volverá a ser un país de hermanos.

10)   El día en que haya una estatua de Pinochet junto a de Allende, recién ahí podrá decirse que “Chile volvió a ser un país de hermanos”.

11)   La izquierda lleva décadas tratando de enmudecer artificialmente al Pinochetismo, y lo único que ha conseguido con eso ha sido aumentar las odiosidades en Chile: ¿por qué no intentar lo contrario?, ¿no habrá llegado ya la hora de dejar que cada cual pueda hacer públicos homenajes a quien se le dé la gana? Mal que mal, ambas posturas (la de la UP y la del Gobierno Militar) tienen sus adeptos y defensores, y creo que acallar artificialmente a una de ellas siempre será para peor.

Augusto Pinochet U.

12)   No deja de ser divertido ver como los “Pro Derechos Humanos” critican a Pinochet, pero sin embargo admiran, defienden y/o respetan profundamente a criminales como Fidel Castro, Erick Honecker y el Che Guevara: ¡linda forma de pisarse la cola!

13)   A diferencia de la derecha chilena, que sólo admira a un dictador, la izquierda chilena admira a varios dictadores: Mao, Lenin, Fidel Castro, Honecker y Kim Jong Il, entre otros… y más encima tienen la hipocresía de venir a hablar de Derechos Humanos: ¿con qué cara?

14)   Pinochet sí fue dictador: pero fue un dictador que salvó a Chile de haber caído en algo mucho peor, en una guerra civil entre compatriotas.

15)   Al hablar de “Dictadura”, me refiero al concepto griego de Dictadura: un gobierno enérgico, que asume por la fuerza, pero que le da estabilidad a la nación cuando ésta estaba sumida en un período de caos.

16)   Quienes atacan a Pinochet, en su mayoría son individuos que son capaces hasta de celebrar muertes ajenas, lo cual para mí es lo más bajo a lo que puede caer un ser humano. Decir de esos sujetos que son “mierdas de personas”, es ser demasiado cariñoso con ellos…

17) Si bien siento un profundo rechazo por esa gente que celebra muertes ajenas, creo que hay que tratar de dejar los rencores de lado por ambos lados. Chile necesita de tolerancia para llegar a un pacto entre hermanos, algo similar a la amnistía que se logró en Sudáfrica gracias a Nelson Mandela.

18)   Ojalá un día Chile deje todas las odiosidades de lado. Hasta ahora, la derecha ha hecho muchos gestos hacia la izquierda, mientras que la izquierda no ha hecho ninguno. El día en que ambos pongan de su parte, recién ahí se podrá dar vuelta a la página.

19)   Escribir sobre temas vinculados a Pinochet y al Gobierno Militar no es quedarme pegado en el pasado: es tratar de impedir que la izquierda reescriba la historia de Chile a su pinta.